OBEDECER

Cuando hablo con parejas casadas les pregunto: ¿Cuál es el mayor enemigo que tienen en su casa? La respuesta es extraña, pero cierta: La rutina es la mayor enemiga. Hoy fue como ayer, igual que el día anterior. Es un día distinto en el calendario pero es la misma rutina. La monotonía mata el amor, arroja fuera la pasión y destruye las relaciones. ¿Cómo este concepto aplica al servicio? Tengo tres retos para ti:

1. Deja la zona de la comodidad. Da más de lo que piensas que puedes dar. Da hasta que duela. Ponte de acuerdo con Dios con respecto a apoyar un proyecto de la iglesia o un esfuerzo evangelístico o una persona que necesite ayuda. Pon a Dios a prueba. Ve más allá de tus habilidades.

2. Si tú quieres tener lo que nunca has tenido, da lo que nunca has dado antes. En otras palabras si sigues dando lo que has dado antes, siempre tendrás lo que has dado todo el tiempo. ¿No es hora de ir al siguiente nivel? Ve más allá de tu zona de comodidad.

3. No esperes a que las condiciones estén buenas, comienza a servir hoy. Te garantizo que si sigues esperando a que las cosas sean ideales para comenzar a servir, entonces te aseguro que nunca comenzarás. Sé que no te gustaría quedar mal, pero es hora de no perder la oportunidad que Dios te ofrece de ir más allá de tus posibilidades. ¡Acepta el reto de Dios! ¡Comienza a servir!

SABER COMPARTIRLO

1. Deja que las cosas tomen su rumbo y ríete de ti mismo.
2. Comparte tu último bocado.
3. Haz una pausa en tus labores diarias para ayudar a alguien.

MI ORACIÓN PARA EL DÍA DE HOY:

Dios, te pido permiso para ir más allá de mis posibilidades. Sé que me ayudarás. Amén.

Hoy fui más allá de mis posibilidades y me siento… _____ ___________________________________________________________________